Menor actividad en el corto plazo y señales más claras hacia adelante

Desde la demanda había expectativa en cuanto a que, a esta altura del año, teniendo en cuenta las excepcionales condiciones forrajeras del verano y el retraso en la venta a faena por los elevados precios de la reposición, habría una disponibilidad de oferta que les permitiría mantener un nivel de actividad fluido a precios acordes con las referencias de la carne en el mercado internacional. Pero el exceso de lluvias complicó las cosas, los precios subieron y empezaron a aparecer señales más claras para que los corrales de engorde tengan una mayor cantidad de animales disponibles para faena a la salida del invierno. Luego de que quede atrás la ventana de cuota (en algunas plantas ya terminó), son varios los frigoríficos que están planificando reducir días de faena. Es el caso de la planta de Minerva BPU, que esta semana hizo solo dos faenas y en las siguientes la planificación es de tres faenas por semana. En alguna otra planta del grupo también está previsto quitar días de faena. En Marfrig no está previsto el cierre de ninguna de las cuatro plantas, pero se está “evaluando sacar algún día de faena”, dijo un integrante del grupo. Lo propio sucede en otros casos. “Yo creo que se dará una baja general”, afirmó un industrial. Se habla de que en algún caso se retrasó para junio la llegada de un equipo kosher que estaba previsto que comenzara a trabajar la semana próxima. Es que la oferta no es que no aparezca, sino que “no está”, aseguran los intermediarios consultados. Y la manera de evitar un espiral alcista en los precios (que no convalida el mercado internacional) es reducir actividad. Mientras tanto, desde el sector de los corrales hay quienes afirman que en los últimos días “comenzaron a aparecer señales más claras para encerrar”, sea cuota o no cuota, ante la perspectiva de un faltante de hacienda de pasturas para los meses de julio a setiembre. Es usual que se cierren negocios a ACG más 30 centavos por kilo carcasa (lo que hoy estaría dando US$ 3,92 el kilo), pero también estarían ofreciéndose precios fijos por encima de los US$ 4 por kilo, aseguró un integrante del sector. “Se dieron cuenta del hueco de oferta que habrá en julio, agosto y setiembre”, indicó. De acuerdo con el índice de costos del corral elaborado por Tardáguila Agromercados, el costo teórico actualmente es de US$ 3,93 el kilo carcasa, 8 centavos menos que el mes pasado debido a la leve baja del precio de la reposición y una cotización del maíz que se mantiene con una referencia de US$/t 150 puesto en destino. El diagnóstico sigue siendo el mismo: si no se dan claras señales para acelerar la terminación de animales jóvenes, la oferta será escasa este año, tanto en el caso de vacas (por el elevado porcentaje de preñez) como en el de novillos, donde también está compitiendo la exportación en pie, con la compra de unos 25 mil novillos formados y la expectativa de que se sigan haciendo negocios.